En Ecuador, la siniestralidad vehicular es un tema alarmante. Los accidentes de tránsito son la principal causa de muerte en el país y la principal razón de muerte violenta en jóvenes entre los 18 y 29 años. Según la ANT y con cifras a noviembre del 2022, en promedio 6 personas pierden su vida a diario en las vías y carreteras del Ecuador, es decir una cada 4 horas al día.

Por esta razón es importante saber reconocer si un vehículo es seguro no sólo durante la conducción, sino sobre todo en un escenario de colisión y tomar en cuenta qué nivel de protección me brinda el vehículo y en qué tanto exponemos la vida de los ocupantes.

Generalmente cuando adquirimos un nuevo vehículo – sea nuevo o usado - todas las preguntas son en torno a las características técnicas del modelo o los datos comerciales de la casa automotriz. En el Ecuador, son pocas las marcas que ofrecen y garantizan niveles altos de seguridad a través de la calidad del motor y demás partes automotrices, la cantidad de airbags que dispone un vehículo o los sistemas mecánicos y de asistencia durante la conducción.

Sin embargo, ¿cómo cerciorarse que esa información es real y neutral desde un ente regulador que certifique esos niveles de seguridad? Con una sola pregunta: ¿Con cuántas estrellas de seguridad ha sido galardonado mi vehículo? ¿Con 1 o con 5 estrellas?

Las estrellas de seguridad asimilan un puntaje de los niveles de protección que tiene un vehículo basándose en su comportamiento en pruebas de impacto frontales y laterales, es decir al momento de sufrir un siniestro. Existen varios organismos independientes conocidos como Programas de Evaluación de Autos Nuevos (NCAPs) que son los encargados de evaluar y calificar la seguridad de vehículos recién introducidos al mercado, publicar sus reportes mecánicos mediante pruebas de choque y otorgar las estrellas de seguridad a cada marca.

A nivel mundial existen 10 organismos reguladores que pueden otorgar los puntajes de seguridad, entre ellos el EuroNCAP en Europa, JNCAP en Japón, ANCAP en Australia, ASEAN NCAP para el sur de Asia, LatinNCAP en América Latina, USNCAP para Estados Unidos y CNCAP en China – este último basado en su mayoría en las reglamentaciones de la EuroNCAP.

Por lo tanto, un vehículo cero estrellas es aquel en el que alguno de sus ocupantes puede recibir varias y alarmantes lesiones de riesgo de vida; mientras que en un vehículo cinco estrellas, en las mismas condiciones de choque, sus ocupantes tienen grandes probabilidades de no sufrir heridas graves o permanentes.

Gracias a estos programas es posible medir la seguridad de los vehículos y establecer una calificación con un número determinado de estrellas, con el fin de reducir las muertes en carretera y estableciendo pautas para que las nuevas opciones sean cada vez más seguras.

En Ecuador, el mercado de vehículos chinos ha crecido significativamente en el país y en general es un nicho que aún recibe una percepción dudosa respecto a la seguridad por parte de los usuarios; por esa razón, es importante saber reconocer qué marca automotriz brinda total protección a sus ocupantes.

GAC Motor es la única automotriz asiática con presencia en el país que ha sido galardonada por la C-NCAP con el puntaje de 5 estrellas de seguridad en todos sus vehículos. Sus modelos están fabricados con la prioridad de la calidad ante todo y tecnología de punta que ofrece potencia y confort, compitiendo con marcas de talla mundial.

“Para GAC Motor, la calidad y seguridad es primero. Nos comprometemos en fabricar excelentes vehículos pensando en la protección de la familia y los seres queridos, por esta razón queremos educar a nuestros usuarios y a la comunidad sobre la importancia de contar con 5 estrellas de seguridad, como nuestros modelos las tienen”, menciona Pedro Torres – gerente comercial de GAC Motor en Ecuador.
 
Adicional, el compromiso de la automotriz asiática es promover un nivel mayor de seguridad que exige todos los requisitos de las pruebas NCAP y 5 estrellas. Esta nueva generación de seguridad fue creada por GAC MOTOR INTERNACIONAL, denominada TOP SAFETY o SUPERSEGURIDAD, donde se elevan las exigencias de las pruebas y se exponen los vehículos a exhaustivas y abusivas demostraciones como lanzarlos de 5 metros altura o aplastarlos con una volqueta cargada con 22mil kilogramos, todo con la finalidad de que el habitáculo y los ocupantes salgan sin rasguños.